El ministro ha pasado revista de los retos a los que tiene que hacer frente al sector agroalimentario. El cual se está viendo seriamente afectado en los últimos días, debido a la invasión Rusa de Ucrania en especial, por la interrupción de importaciones de aquel país de cereales y oleaginosas.
También resulta preocupante la subida del gas. Con ello sus repercusiones en los costes de producción de fertilizantes nitrogenados. Para el ministro se trata de una situación excepcional que afecta a todos los países de la unión europea y por lo tanto requiere de una respuesta conjunta.